Procedimiento eficiente para recubrir superficies poliméricas, especialmente dispositivos médicos plásticos, con nanoplacas de oro sintetizadas in situ. Este recubrimiento inhibe la formación de biofilms bacterianos y fúngicos, gracias a las propiedades antimicrobianas del oro a escala nanométrica. El proceso es simple, económico y no genera residuos tóxicos, utilizando únicamente HAuCl₄ y gentamicina como reductor en medio acuoso, y requiere mínima energía térmica. Las nanoplacas obtenidas se adhieren fuertemente a la superficie y conservan su efecto anti-fouling tras exposición a fluidos clínicos, demostrando eficacia en catéteres y prótesis frente a cepas como P. aeruginosa, E. coli y S. aureus.